Me gustan las mañanas campesinas
miel dulcita, suave brisa de las flores
los pájaros de todos los colores
felices van cantando sus amores
Y en mi ranchito
me paso la vida entera
disfrutando a mi manera
de aquel lugar tan bonito
hecho a mi alcance
distante de la ciudad
donde con tranquilidad
podré vivir mi romance
Ay lay la lay
en un riachuelo cercano
me voy a bañar de tarde
con el agua fresquesita
nacida en los manantiales
todo lo sano del campo
se me ha metido en la sangre
y me corre por las venas
igual que a un potro salvaje
sin montura sin bozal
ni lindero que lo ataje
por eso me identifico
con lo verde del follaje
con lo puro de la brisa
que va peinando al paisaje
con el cuatro bullanguero
y el sonar de su cordaje
con la kirpa y la chipola
con el corrío y el pasaje
allí se queda plasmada
la esencia de mi mensaje
que tiene fibra de indio
por su temple y su coraje
Me gustan las muchachas de mi tierra
siempre hermosas cariñosas y sencillas
de noche son luceritos que brillan
mi tierra es una eterna maravilla
Tengo en el campo
mi fuente de inspiración
donde ahoga el corazón
sus penas y sus quebrantos
y a mi caballo
tempranito los domingos
le doy un baño y lo ensillo
y me voy par los gallos
Ay lay la lay
me gusta contrapuntear
con copleros veteranos
de los que cargan el verso
tempranero a flor de labios
de los que visten el arpa
con blancos lirios de mayo
y se van por esos rumbos
que transitó Cantaclaro
yo jamás podría negar
que nací en un vecindario
impregnado de costumbres
rodeado de ambiente sano
donde el rejo y la totuma
fueron como mis hermanos
el conuco y el jagüey
eran sitios muy sagrados
la tinaja de beber
siento que me esta llamando
a compartir con la tierra
lo que ayer dejé sembrado
el amor y la constancia
que nunca me abandonaron
regresaré a mi terruño
a cantar en los parrandos
y a los pueblitos más criollos
volveré de vez en cuando
en cada fiesta que anuncien
tarde de toros coleados