Dos mujeres en mi vida,
compadre mío me tienen el río revuelto.
A una no puedo dejarla
le guardo mucho respeto,
la otra es un vendaval
de caricias y de besos
y esa forma de quererme
que me deja sin aliento.
(Bis)
Las dos tienen en su haber
un ejemplar comportamiento.
¨Por belleza no hay apuro
las dos son un monumento
cuando quieren parrandear
van conmigo por supuesto
y lo mejor de las dos
hogareñas cien por ciento.
Mis hijos y mi mujer
todo el tiempo están contentos
dicen que yo soy el padre
mejor de todos los tiempos
pero al verme con la otra
si supieran lo que siento
no puedo dejar de amarla
ni por un solo momento.
Dos mujeres en mi vida
compadre mío me tiene comprometido
a una no puedo dejarla
por la otra doy suspiro.
El cariño que les doy
palabra que no es fingido
aunque el amor entre tres
no debe ser compartido.
(Bis)
Las mujeres compadrito
son un jardín escondido,
si se riegan con fervor
se mantendrá florecido
brindándole al jardinero
perfumes y coloridos.
Así mismo es el amor
cuando es bien correspondido.
Que yo no invente la vida
es un dicho conocido.
No creo en casualidades
escrito esta mi destino,
que me perdone el señor
por errores cometidos
si por amarlas pequé
las quiero como castigo.
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